Essential Killing

Crítica: Essential Killing

Título: Essential Killing. Año: 2010. Duración: 83′. País: Polonia. Director:  Jerzy Skolimowski. Guión: Jerzy Skolimowski. Música: Pawel Mykietyn. Fotografía: Adam Sikora. Reparto: Vincent Gallo, Emmanuelle Seigner, Nicolai Cleve Broch, Stig Frode Henriksen,David L. Price, Phillip Goss, Lars Markus Verpeide Bakke, Klaudia Kaca, Robert Mazurkiewicz, Dariusz Juzyszyn, Iftach Ophir.

‘Vincent Gallo tiene una cualidad animal’ (Jerzy Skolimowski)

El hecho de que la dilatada carrera cinematográfica de Jerzy Skolimowski tenga, por el momento, su última parada en Essential Killing (2010) una producción que mezcla el thriller con la crónica política, no quiere decir que el realizador polaco busque de cualquier manera una camino «indie» hacia su supervivencia cinematográfica en estos tiempos que corren. Nada más lejos de la realidad, su presencia en el panorama cinematográfico más comercial se sustantivó con su aparición como actor de reparto en Los Vengadores (The Avengers, 2012 ) o antes en Promesas del Este (Eastern Promises, 2007). Y es que el bueno de Skolimowski lleva ya cuarenta años dedicado por entero al cine en todas sus facetas. Esta última producción, radicalmente minimalista e independiente nos muestra un perfil de realizador que mira al mundo y transmite sus conclusiones en forma de una obra cinematográfica de género.

Essential Killing no elude sus referencia, claramente expresadas mediante un argumento que recuerda sobremanera a aquella comprometida cinta de Joseph Losey, Caza Humana (Figures in a Landscape, 1970), película dura y  políticamente incorrecta que daba cuenta de forma alegórica de la represión de las dictaduras latinoamericanas en los años 70. Essential Killing recurre a un esquema argumental parecido pero con un guión que se apoya en los incontestables hechos que han generado esa fantasmagórica y laxa doctrina llamada war on terror -guerra contra el terrorismo-, cuyo fruto envenenado ha resultado ser la vulneración de un buen puñado de derechos fundamentales que las intervenciones militares precisamente querían volver a instaurar en los países donde golpeaban con todo su aparataje hipertecnológico.

Vincent Gallo es el protagonista absoluto de Essential Killing; interpreta a un miliciano afgano detenido y llevado en secreto a un país del  Este de Europa para su ¿interrogatorio?. En el transcurso del viaje, el miliciano sin nombre logra huir, encontrándose con una dura supervivencia en medio de un paisaje helado y desolado. Es ahí donde el título del film se desvela como fundamental para comprender la otra parte de la película, Essential Killing, «la muerte esencial» se podría traducir literalmente, pero se entiende mejor si nos referimos a aquel asesinato que se realiza como medio necesario para la superviviencia. Así, Gallo, no duda, al igual que John Rambo en Acorralado (First Blood,  1982) -película con la que también tiene claras muestras de acercamiento-, en usar toda su astucia para sobrevivir al entorno y a sus perseguidores, quitándose de en medio sin ninguna vacilación, pero con evidente remordimiento -sólo hay que fijarse en la expresión de su cara cuando tiene que asesinar a alguien-  a todo aquel que se interponga en su camino. La interpretación de Vincent Gallo es tan proporcionada y sincera que obtuvo la codiciada Copa Volpi del Festival de Venecia  2011 por esta actuación.

La película protagonizada por Vincent Gallo, y que también cuenta con una aparición como actriz de reparto de Enmanuelle Seigner , puede parecer ingenua a veces. El guión salta obviedades relativas a la supervivencia del protagonista que a veces pueden hacernos sonreír, porque es cosa flagrante que un hombre en las condiciones en las que se encuentra difícilmente podría sobrevivir un par de días en un paraje tan inhóspito. No obstante, estos problemas de credibilidad se pueden pasar por alto si nos atenemos al carácter indie de la cinta, y sobre todo a la honradez del mensaje que el realizador nos quiere transmitir en sus múltiples niveles de lectura. Essential Killing está conformada como una obra deficitaria en aspectos técnicos y presupuestarios -he aquí el caballo de batalla de este film, a lo que se invita a los espectadores a visionar el extra incluido en el dvd/bluray- pero muy completa en lo referente a la andadura vital del personaje y el contexto en el que se desenvuelve, desde su comienzo como miliciano en Afganistán -con esos flashbacks que explican las motivaciones religiosas que le mueven a combatir- hasta su desesperación en un país y ambientes que le son por completo ajenos. Como oda al coraje del protagonista la película se despide con la imagen de un solitario caballo blanco manchado de sangre caminando por el paisaje nevado, una alegoría de la libertad, pero también del fatalismo, de lo inevitable del destino, una imagen de cierre que nos  despide de nuestro silencioso protagonista.

Como colofón a esta reseña no está de más hacer un repaso a algunos de los mensajes en off que son introducidos en los flashbacks, leitmotivs propagandísticos para los yihadistas, tan ingenuos como peligrosos, que en el fondo no se diferencian tanto de los que se marcan nuestros líderes políticos para mandar a los soldados a bombardear, secuestrar y torturar a ciudadanos de países al otro extremo del mundo. Sólo hay que cambiar palabras como «Alá» por «democracia». Los textos están copiados de los subtítulos de la película.

«There´s no living creature but he holds it by its forelock, surely my lord is on the right path.

Warfare is ordanied for you, though it is hateful unto you; but it may happen that ye hate a thing which is good for you and it may happen that ye love a thing which is bad for you.

Allah knoweth, ye know not.

Let those fight in the cause of Allah who sell the life of this world for the hereafter. And whoever fights in the cause of Allah whether he is slain or gets victory soon shall we grant him a mightly reward.»

Essential Killing