Freaked

Crítica: Freaked, la disparatada parada de los monstruos

Título: Freaked. Año: 1993. Duración: 86 min. País: Estados Unidos. Director: Tom Stern, Alex Winter. Guión: Tim Burns, Tom Stern, Alex Winter. Música: Kevin Kiner. Fotografía: Jamie Thompson, Jene Omens. Reparto: Brooke Shields, William Sadler, Deep Roy, Brian Brophy, Michael Stoyanov, Morgan Fairchild, Megan Ward, Randy Quaid, Mr. T, Lee Arenberg, John Hawkes, Arturo Gil, Alex Winter, Tom Stern, Michael Gilden, Ray Baker, James B. Robergs, Keanu Reeves. 

Freaked o La Disparatada parada de los Monstruos: ¿Divertida? Mis cojones treinta y tres.

 El cine. Un mundo en el que un director de “films” se permite el lujo de experimentar con el espectador como si te aplicasen en tu butaca el método Ludovico de La Naranja Mecánica. Es un mundo abierto a cualquier idiota que quiera enseñar sus sueños húmedos en pantalla, y en este caso el cine de serie Z está absolutamente copado de ese tipo de gente (como Uwe Boll). Esta tendencia debería haber terminado con el señor Wood y sus películas sobre transexuales plumíferos, vampiros espaciales infectos (no, no es Lifeforce)y demás tonterías demenciales que no sirvieron más que para recordarle a nivel global por lo cojonúdamente malo que era el muy bastardo. Pero visto que nadie quiso revitalizar la Santa Inquisición para acabar de raíz con estas cosas (parece ser que nunca tuvieron buenos publicistas),o que el Ku Klux Klan dejase de hacer el payaso con sus estupideces diarias y se dedicase a acabar con este tipo de prácticas aberrantes, nos hemos tenido que tragar décadas de mierda y encima lo hemos permitido.

Lo peor de todo es que no se porque me sigue fascinando este submundo cloaquero.

Este tipo de cine tiene una capacidad de inmunidad absolutamente asombrosa, solo hay que ver la cantidad de gilipolleces hechas (con según que intenciones) que nos siguen avergonzándonos sin piedad y que por supuesto seguimos consumiendo. Se reproduce tan rápido como hongos encontrados en un vistazo rápido a los pies de un homeless.

Y parece imparable

El mundo de la caspa es curioso. Durante años he creído que si todo el arsenal nuclear del planeta reventase a la vez, solo Jordi Hurtado y las cucarachas sobrevivirían a la hecatombe resultante. Eso quiere decir que seguiría haciéndose Saber y Ganar aunque toda la población de la Tierra la palmase, pero eso se debe a la gran capacidad de adaptación de las cucarachas y de Jordi Hurtado (que conste que admiro a Jordi Hurtado y hablo de el solo por su increíble capacidad de adaptación al entorno y no porque lo compare con una cucaracha). Por supuesto he de decir que las cucarachas son unos animales muy admirables solo por el hecho de poder resistir un bombazo nuclear y quedarse tan panchos como si aquí no hubiese pasado una “shit”. Pero la gentuza que hace serie Z se suelen quedar tan panchos sea como sea, y hagan lo que hagan, y por eso la comparación es obligada ya que esta gente que “dice que hace cine” son comparables a los bichos a los que acabo de aludir por considerarse a ambos colectivos igual de asquerosos y alienantes. También ambos grupos se suelen dedicar en exclusiva a revolcarse en la basura que producen día si y día también, pero al menos a las cucarachas las exterminamos con mata-cucarachas y a los otros les tenemos que aguantar porque eso de usar insecticidas con ellos es moralmente reprobable (por cierto que mierdas deben llevar esos productos de genocidio cucarachero, si una cucaracha puede aguantar perfectamente la radiación como si estuviesen de Top less en las playas de Ibiza). Pero a diferencia de estos admirados animalillos, solo algunos de estos “directores” saben adaptarse a las circunstancias del mundo cinematográfico actual (aunque ellos prefieren verse mas como escarabajos peloteros, cuanta más mierda acumulan en un film más épicos se creen) y son precisamente esos los que sobreviven. Pero no es así, porque las heces apestan bastante mal, ya que al fin y al cabo, sigue siendo mierda.

La experiencia nos ha demostrado a día de hoy que co-dirigir una película excremental no es sinónimo de éxito, es más bien sinónimo de (efectivamente)hacer un truño de dudosa calidad y procedencia, y esto amigos míos no es un caso aislado. Pero tampoco es bueno que dirija la película dos de los guionistas, si encima uno de ellos es el protagonista, que demuestra en la misma que tiene un registro de lo más limitado posible, al nivel de la capacidad interpretativa de Krusty el Payaso. Así que para insultar a esta gentuza tuve que ponerme manos a la obra, y tuve que acudir a la tan socorrida San IMBD a ver si escarbando un poco encontraba algo memorable en sus carreras en el mundo del celuloide y esto simplemente era un bache gigantesco en sus carreras.

Pues va a ser que no

Tom Stern y Alex Winter, guionistas, directores y el ultimo ademas protagonista de Freaked (1993) lo hicieron de puto culo, siendo recordados (es un decir) por el público por no haber hecho absolutamente nada en sus vidas. Con esta película, intentaron hacer un homenaje de la original Freaked del año “catapumchimpum” (1941) para solo acabar disparándose al pie, reventándolo completamente y dejándolo sanguinolento y sin forma discernible, momento en el que debieron abandonar el cine y por fin dejar de hacer el mongolo. Pero esta gente es difícil de eliminar, así que unos pies de menos no es razón suficiente para abandonar la profesión (el fracaso absoluto también podría serlo, pero tampoco)y por tanto se dedicaron el resto de sus vidas, después de este momento de absoluta falta de vergüenza, a hacer mas basura fílmica, esta vez arrastrándose sobre sus vientres ya que no podían andar como antes. Pero esta gente tenía algo en mente cuando propusieron a “productores con criterio” esta película, y simplemente se ciñeron a un mantra muy conocido por las antípodas fílmicas donde ellos pululaban. Parece ser que cualquier cosa (En serio cualquiera, solo tenéis que ver mis post anteriores) que muestre al mismo tiempo imágenes y sonidos debe ser considerada una película. Da igual que este lleno de un vació siniestro y aterrador, que sea un terrible tormento, o que sea pretencioso y hipster a mas no poder, eso da igual, solo se necesita sincronizar esas dos cosas a la vez y ya esta todo el trabajo hecho.

En Freaked no hay normas fijas y este tipo de gente lo sabe muy bien

Da igual que Freaked esté grabada en vídeo cutre de los ochenta, con la cámara de la gasolinera de enfrente, sin pautas ni guiones fijos, que apalices a un “Recoge-cartones” y lo montes después en el garaje de tu casa, que los interiores sean la casa de tu abuela o que los planos sean un puto caos. Eso sí, aparte de todo eso la película ante todo tiene que durar mas de una hora, si no seria un mediometraje o algo peor y la gente se deshuevaria a tus espaldas (o a la cara si eres un hombre y te va eso de verlo en riguroso directo) ya que creerían que has hecho algo chano y pedorro al nivel de un cortometraje pretencioso, y encima solo para demostrar que no tienes ni puñetera idea de hacer cine, Y suele pasar mas a menudo de lo que creemos. Pero si la cosa dura mas de una hora, puede llegar a ser considerada una obra maestra. Y con esta idea en mente empezaron a rodar este amago de película.

Como el guion por si mismo olía a fermentación de la chunga, decidieron que se la jugarían cogiendo a estrellas de medio pelo de entonces y ponerles en roles ridículos (a los que el publico medio no estaba acostumbrado) para ver si a alguien le gustaba.

 Pero de gustar Freaked, una mierda pinchada en un palo

La ¿historia? Podría decirse que Freaked es una especie de fusión de la Isla del Dr Moreau (la del gordo Brando o la versión Halloween de los Simpsons, a vuestra elección)con intentonas de Agarralo como puedas y las películas de Peter Jackson de sus principios en el mundo del cine “Kasparoviano” (bonita manera de llamar a la caspa).

En fin, la historia de Freaked es mas o menos así: El ambicioso Ricky Coogan actor de profesión (Alex Winter alias Krusty el payaso sin maquillaje) es contratado por la empresa ESS Corporation para promocionar el Grotex 24, un tóxico biogenético. En un principio se niega, por las mutaciones que ha provocado en Estados Unidos y Europa (y debería haberlo hecho porque en directo ve una mutación extraña), no obstante es convencido con cinco millones de dólares, que lo hacen cambiar de opinión.

Para realizar la promoción es enviado a la República de Santa Flan (según la película la patrona de los santos postres) en Sudamérica. En medio del viaje, Coogan se encuentra con Elijah Skuggs un magnate de Texas (mas que encontrarse se estampan de morracos frente a su antro de perversión. Y no, no es un puticlub), que realiza experimentos con el Grotex-24 para crear multitud de degeneraciones mutantes (todo con maquillaje de dos putos duros). Ricky es convertido en un mutante, un hombre mitad bestia-mitad humano y así Elijah utiliza a los mutantes en su circo para diversión del populacho (en vez de para conquistar el mundo con sus poderes cutres), pero Coogan pronto los liderará para hacerlos libres y detenerlo antes de convertir en mutantes a toda la humanidad (ya que los maquilladores de la película en realidad son muy vagos, y pasan de maquillar a tanta people como han hecho hasta el momento, llegando a estar los personajes más pintados que la furgoneta de Scooby Doo).

Aquí es cuando viene lo fuerte. Cuando pensamos en mutantes nos viene a la cabeza a los X-Men (o cualquier tío con una X en el cinturón que pertenezca a la Marvel), los 4 Fantásticos, Las Tortugas Ninja, los mutantes de las alcantarillas de Futurama o el mas agradable de todos: El Vengador Toxico. Pero más que parecerse a un grupo de gente respetable que ha sufrido una terrible mutación y lloran por las esquinas por su humanidad perdida (véase mutantes de la Marvel o Vampiros maricas de Crepúsculo)parece que se han juntado con la Troma para darles ideas y crean Superheroes parecidos a los de Tromaville en el Vengador Toxico IV como eran La Vibradora, el Sargento Kabukiman, El Masturbador, Mantecaman (los momentos de felaciones a cambio de bollitos en la película son impagables)La Vaca Loca, el hombre delfín y el de las palmas peludas. Realmente esos superheroes de la Troma eran poco respetables, pero gracias a la película Freaked, han pasado al Olimpo de los grandes equipos de superheroes de la historia. Así que aquí viene el grupo de bichos raros de Freaked (sin contar al Sapo y a los dos ojos gigantes, literales, que vigilan la entrada): Tenemos a Vaquero (un hombre vestido de vaquero y con cabeza de vaca que encima es el otro director del film, lo cual quiere decir que lo hace de putísimo culo), al hombre calcetín (un hombre con cabeza de calcetín que en realidad es una mano humana corriente y moliente enfundada en un calcetín) interpretado por Bobcat Goldthwait el actor que salia en Loca Academia de Policía haciendo de loco, la voz del Sr Floppy en Infelices para siempre y que el mayor merito de su vida fue el haberse casado con Nikki Cox (¿ahora le odiáis eh?), la mujer barbuda (MR T sin tanto oro del moro en el cuello, haciendo el papel que bien podría haberle valido un Oscar. Especial atención al momento en el que actuá en el show de los monstruos y da consejos de belleza al publico allí sentado), el hombre rana (un tío que va siempre vestido de buzo el cual incomprensiblemente esta mutado, pero que solucionaría su mutación simplemente quitándose el traje), el hombre gusano (el personaje más moñas de la película con diferencia), la mujer calva (Personaje incomprensible por antonomasia), unos siameses macho y hembra uno de ellos interpretado por Michael Stoyanov alias el hermano de Blossom y el tío que sale medio minuto en vuestro adorado El Caballero Oscuro de Nolan, y con la parte de la chica interpretada por Megan Ward conocida por ser la protagonista del Cuchitril de Joe (al final sabia que conectaría las cucarachas de alguna manera y todo) un Chico perro-hombre-bobo pobremente interpretado por Keanu “sin ningún carisma” Reeves, Una llave inglesa mutada en martillo por el genio malvado tejano (el mejor actor de la película con la excepción de MR T), Narizotas (un tipo que es una nariz gigante)y… bueno mejor que lo veáis porque por la película también sale Brooke Shields autohumillándose por haber hecho Regreso al lago azul (no tiene mucho merito porque también lo hacen en la película de South Park).

Freaked parece hecha por un grupo de críos que están grabando una película para su clase de “degeneración terráquea” o para donde se entreguen estas mierdas, demostrando un mal gusto continuo. La gente bizquea continuamente al límite de poner los ojos en blanco, poniendo caretos de gilipollas cuando dicen algo ¿serio? Y dando la conclusión de que la película es mas perturbadora de lo que parece y que los personajes son bastante oligofrenicos en conjunto. Es dolorosa como una factura del dentista, e intentan meter gags a calzador como si esto fuese una peli de Leslie Nielsen, cuando evidentemente no lo es. Todo lo cual, aunque infumable, sería mínimamente tolerable si no estuviera aderezado con una historia tan alcantarillera como todo de lo que ya he hablado, haciendo de esto un guión tan nefasto que parece que rodaron sin él (vale, Rutger Hauer actúa básicamente sin guion, pero nadie nos quejamos) y llevado sin ningún tipo de control en el cual meten subtramas completamente innecesarias, como las mismísimas tonterías románticas de mierda incrustada con calzador completamente superflua y predecible desde el minuto 10 (más que nada porque la zagala no sale hasta ese minuto haciendo de hippie abraza-arboles que casualmente está en contra de la malvada multinacional anteriormente mencionada)que directamente sobra porque no lleva a nada. Por supuesto el protagonismo de la película se lo lleva el Grotex-24 y la malvada compañía llena de bastardos hijos de puta que solo quieren hacer el mal porque son malos y el mundo les ha hecho así, pero en vez de parecer malos parecen un grupo de gilipollas del montón que simplemente hacen las cosas así, porque les va eso de hacer el mal a piñón fijo. La premisa de la multinacional corrupta y perpetradora de crímenes a nivel mundial es la excusa perfecta para que los guionistas usen lo que en un principio debería haber sido un Mcguffin y acabe convirtiéndose en el maravilloso bolsillo mágico de Doraemon de donde salen todas las degeneraciones y maldades posibles del Universo conocido a través de esta empresa. Y para aderezar mejor el potingue este que nos tenemos que tragar con la nariz tapada, el malo se dedica a exhibir toda una colección de caretos y risotadas sardónicas telefónicas para demostrar lo malvado y facineroso que es. Con esta plana y absurda premisa se permiten torturarnos la hostia de tiempo (se hace laaaaaaarga y agónica) intentando hacernos pasar un buen rato, cuando ni siquiera ellos se dieron cuenta de la bazofia que estaban montando en la sala de edición. Con todo esto en mente y unido en un sinsentido, se masca la tragedia desde el momento de los créditos iniciales que están hechos con plastilina de un crió de 3 años mutando como si fuese algo en plan “WOW”, que consiguen que te huelas algo malo desde el principio, y que puede ser calificada como algo peor que una película de sobremesa de Antena 3 (y mira que he visto Telefilms malos, pero aun así me declaro absoluto admirador de esas “obras de arte”) que no debería haber llegado jamas al circuito comercial.

A Freaked no hay por donde pillarla, no hay nada que me hiciese esbozar una sonrisa, nada divertido, nada que te haga recordar la película de ninguna manera positiva, mas bien te apetece verter toda la bilis acumulada mirando el film y verterla sobre todos y cada uno de los miembros del equipo (imaginaos la bilis que acumule viéndola si me da para rociar a todo un equipo de rodaje). Probablemente sea duro con toda esta gente y solo estuviesen adaptándose al entorno mierdero que les impusieron los “directores del film”, pero creo que aun así sigue siendo un crimen contra el buen gusto. Decir que esta llena de despropósitos es decir prácticamente nada, pero al menos todo se soluciona en cuatro decorados y no nos torturan con eternos viajes de decorado en decorado y tiro porque me toca (mejor de decorado de pales a decorado de cartón piedra), como en películas de fantasía épica conocidas por todos nosotros. Todo esto es debido a que da la impresión de suceder toda la historia por pura inercia,“porque lo pone en el guión” y punto, y da igual que MR T se encuentre en el guion mas agujeros que un queso apestoso francés, esto pone que es así y a “cascala”. De hecho la solución para revertir los efectos de las mutaciones es tan paupérrima, que parece directamente escrito por el sobrino (porque espero que no tengan hijos)de alguno de los guionistas  cuando su “tito” le pregunto cómo solucionaría este problema argumental. Pero los guionistas deciden ir un paso mas allá y meter un rollo filosófico que solo un imbécil pondría en una película de tan baja calidad y estofa. Mas o menos el mensaje de Freaked es que las multinacionales corruptas son corruptas (como te hacen creer en el film) y quieren hacernos pupita en el cacas en vez de sacarnos la pasta como hace cualquier empresa del mundo (que para eso suelen constituirse y por ello es bueno eso de que tus compradores sobrevivan), que se dedican a experimentar con “Diosabequecojones” para convertirte en “Quiensabelque” y que seas bueno y amable con la gente en la vida aunque tenga el aspecto y el olor nauseabundo del Doctor Zoidberg. Se nota la desgana del equipo creativo al completo hasta niveles épicos(gracias al montaje epiléptico que se cascan) y esto es debido a que se convierte en una película llena de caos primigenio y aleatoriedad, con muy poco sentido, y aburrida hasta conseguir fosilizarte en el sofá en un único ente, mientras piensas en el post “amable” que les dedicaras en el blog. Los directores intentan tapar la vergonzosa falta de humor con una sordidez que funciona de maravilla en un filme de serie Z pero no en uno como este que se supone que no lo es, lo que acaba convirtiéndolo finalmente en lo que no pretendían que llegase a ser: un producto final increíblemente ridículo y sangrante.

Como colofón final decir que Freaked llegó al top de la podredumbre en su época, y lo mejor es que no hacerla hubiese conseguido que se ahorrasen el bien merecido hostión en taquilla y las toneladas de insultos, procedentes de todos los gilipollas que la hemos sufrido. Pero aun así se hizo y podéis ver Freaked como método alternativo al cicilio o lo que uséis normalmente para fustigaros.