Crítica de El Desconocido, película de Dani de la Torre con Luis Tosar
Título: El Desconocido. Año: 2015. Duración: 102 min. País: España. Director: Dani de la Torre. Guión: Alberto Marini. Música: Manuel Riveiro. Fotografía: Josu Inchaustegui. Reparto: Luis Tosar, Javier Gutiérrez, Goya Toledo, Elvira Mínguez, Fernando Cayo, Paula del Río, Marco Ruiz, Luis Zahera, Ricardo de Barreiro, María Mera, Antonio Mourelos.
El cine español se tiene que felicitar, siguiendo la estela de los recientes thrillers de factura nacional, El Desconocido (2015), segunda y última obra de Dani de la Torre, está situado dentro de la panorámica de renacimiento del cine de género (y de entretenimiento) patrio, una corriente aclamada por un público cuyos gustos y forma de acceder al cine ha cambiado; el espectador medio español es más exigente en ciertos sentidos, pertenece una generación de devoradores de frames que demandan piezas de género que sean estimulantes, con sabor ibérico, pero que adeuden su puesta en escena al cine de acción y thriller norteamericano. Este público, curtido en un alubión de descargas digitales (generalmente ilegales) ha sido auto-educado en la búsqueda de la singularidad fílmica, de la producción modesta pero interesante en la que no falten los clichés de los títulos norteamericanos, los españoles somos modernos aunque desgraciadamente aún nos queda mucho para ser underground.
Decir que el cine español está cambiando es pretencioso, pero creo que ha llegado el momento en el que demos un voto de confianza a los nuevo talentos que se baten el cobre para elaborar películas dignas. Aún por lejanas que nos puedan parecer ciertas filmografías como la del cine de acción asiático o el cine indie norteamericano, los nuevos técnicos y realizadores españoles implantan el modus operandi de aquellas industrias en nuestro país importando modelos que ya han triunfado en sus orígenes. Hasta nos permitimos parafrasear casi punto por punto y adaptar a la realidad española el esquema de series norteamericanas como fue el caso de La Isla Mínima (2014) que copió descaradamente el esquema de True Detective. España es un país que por fin parece despertar a la modernidad cinematográfica, la citada Isla Mínima, Celda 221 (2009) o El Niño (2014) son producciones hermanas de El Desconocido, un destacable thriller, a la par de modesto. Si hace una década nadie apostaba porque hubiese realizadores españoles capaces de afrontar una película de acción sin que se la vieran las costuras, estos títulos mencionados, aún por humildad, que normalmente va acompañada de facturas irregulares, son notables muestras de algo que está cambiando. y El Desconocido se suma a esta tendencia in crescendo.
El argumento de El Desconocido nos va a resultar familiar debido a la cercanía con la situación social de nuestro país: Luis Tosar es un banquero al que se le reclama venganza por sus malas prácticas, y esa venganza, cuando llega, no puede ser más retorcida pues él y sus hijos son rehenes en su propio coche. Un desconocido realiza un llamada de teléfono en la que les indica que en si abandonan el automóvil volará por los aires. Tan brutal vendetta atrae la atención de la policía, que realiza un alucinante despliegue de medios en una ciudad de provincias como es La Coruña, escenario real donde se ha filmado la película, incluidas todas las secuencias de acción aérea.
Dani de la Torre toma buena nota de las tendencias actuales del cine de acción, especialmente las más visuales: Tony Scott y Paul Greengrass son dos referentes omnipresentes en los noventa minutos de metraje. Larguísimos planos secuencia, travellings, tomas cenitales, medios aéreos y una estupenda planificación de las tomas dentro del automóvil del personaje de Luis Tosar, dejan patente el talento de Dani de la Torre y su montador, Jorge Coira, técnicos que ya se han convertido en puntales de este incipiente cine de género español. Hay títulos USA, y no sólo referencias, que ayudan a situar a El Desconocido en la geografía del cine de acción cuyo resultado podemos ver en la pantalla: Última Llamada (Phone Boot, 2002) o la olvidable A la Hora Señalada (Nick of Time, 1995) son películas que jugaron antes que El Desconocido con la angustia del acosador telefónico, un ente despiadado y apático que amenaza desde el otro lado del auricular. El punto de partida de El Desconocido como thriller no es original, pero con el buen equipo que hay detrás de esta producción hace que sea efectivo. Este equipo, en el plano actoral tiene a Luis Tosar como una apuesta segura, a su némesis, Javier Gutiérrez, como protagonista en la sombra y elemento especular del anterior, y la energética Elvira Minguez imprimiendo una fuerza impresionante a cada plano en el que está presente; en definitiva, un plantel que tiene como misión dejar agarrado al público a la butaca hora y media.
El Desconocido tiene trampas; dejando aparte la poca verosimilitud de situaciones propias del género, el aspecto visual como el tintado fotográfico de las imágenes más bien tiene por misión disimular la escasez del presupuesto que ofrecer una atmósfera envolvente, aunque este recurso también funcione en ese sentido y no desentona en demasía con la plasticidad que nos quiere ofrecer Dani de la Torre. El Desconocido es un título modesto, de temporada, y nos produce una agridulce sensación de deja vu -sólo dediquemos un poco de atención a la banda sonora en los primeros minutos de metraje- pero el tiempo nos dirá que hemos disfrutado de una valorable pieza de género y hemos asistido a la consagración de un nuevo director español.