Vamos con la segunda parte de nuestra crónica por el Festival de Sitges 2016. Ahí os dejamos comentarios de otro buen puñado de películas que pudimos ver allí.
THE NEON DEMON
La última película de Nicolas Winding Refn es una muestra de lo incomprendido que es este autor. La mayoría de la crítica y el público no acierta a encontrar las claves referenciales que nos ofrece un título plagado de mitología y estética, donde el texto reluce por su ausencia y las imágenes toman el mando de un metraje que se hace corto para la gravedad de la historia que se quiere contar. La Condesa Bathory, Blancanieves, el mito de Narciso y otros apuntes más o menos difusos se encuentran en esta oda satánica a la posmodernidad que deconstruye -como corresponde a toda obra posmoderna- a su vez al thriller conspirativo. The Neon Demon es una película que necesita más de un visionado para poder siquiera intuir lo inabarcable de su propuesta.
I AM NOT A SERIAL KILLER
Con más buenas intenciones que resultados, esta comedia negra sobre asesinos en serie en un pequeño condado norteamericano no convence a un servidor, pero al resto del público sí pues terminó haciéndose con el premio del público del festival. A juicio del que suscribe esta crónica I am not a serial killer es una película tan tópica e inverosímil que ni siquiera la presencia de Christopher Lloyd la dota de un halo de credibilidad; por otra parte, se dibuja un perfil nada realista del freak adolescente obsesionado con los serial killer, característica ésta -la de falta de verosimilitud- que impregna al cine de género de serie B norteamericano. Esta cinta es otra muestra de lo arriesgado que es seleccionar títulos de la sección Panorama Fantastic.
MELANIE, THE GIRL WITH ALL THE GIFTS
Una nueva propuesta zombie nos llega desde Reino Unido. Quizás para repetir del éxito de la saga de Danny Boyle, 28 días después. El elenco reúne a un trío de estrellas británicas (Glenn Close, Gemma Atterton y Paddie Cosinsine) en una historia apocalíptica que comienza con una fuerza tremenda y continúa con un rosario de buenas ideas que desarrolla entre el género del terror y el de ciencia ficción. Flaquea el final de la película con una conclusión un poco infantil tras haber degustado horrores mil y haber disfrutado de emocionantes escenas de acción. Melanie, the girl with all the gifts es una película que vale la pena incluir entre la mitología zombie contemporánea.
WITHOUT NAME
Interesante película que raya el horror cósmico en una historia muy telúrica que sumerge sus raíces en el confín de la tierra galesa, concretamente en un oscuro y salvaje bosque. El protagonista es enviado allí por una empresa inmobiliaria para descubrir el verdadero valor medio ambiental de la zona y termina envuelto en una trama donde las fuerzas ocultas de la naturaleza le invitarán a unirse a ellas. Without name se prodiga en soluciones visuales alucinatorias, trances psicotrópicos y técnicas efectistas que confieren a la cinta un halo fantasmagórico y ultraterreno. Without Name puede no ser una película fácil de entender si no se toman en serio algunos de los misterios naturales que nos rodean, para los que entren en la trama y en el mundo que el filme propone, será una experiencia muy interesante.
AUTOHEAD
La primera producción india de la que hablaremos en esta crónica es Autohead, un falso documental filmado a pie de calle y que sigue el día a día de un chófer de motocicletas que no controla sus pulsiones homicidas. En este contexto, la crítica social está servida; se nos muestra la cruz de un país que no se ve en los documentales de viajes, un lugar crudo en el que la vida se mide día a día, rodeados de pobreza y muerte. A pesar del formato de falso documental, Autohead no deja de ser realista en ningún momento, todo lo que allí ocurre y el tono con el que se narra es áspero y no va a dar más concesión al público que convertir la miseria en un espectáculo, como denuncia el protagonista en la frase que cierra el texto del filme.
SHELLEY
La escritora del archiconocido Frankenstein no podría estar más de acuerdo con la esencia de esta película, el Mal se hace carne entre nosotros en mitad de un paisaje de naturaleza cruda, descarnada y bella. El aislamiento de los protagonistas y el paganismo de un entorno indómito propician la encarnación del mal en un bebé que tendrá una madre de alquiler. Con guiños evidentes a La Profecía, Shelley se desmarca de aquel carácter visual tan convencional y camina por derroteros más elegantes, imprimiendo romanticismo y oscuridad a su metraje. Un final demasiado abierto a conclusiones tambalea la estructura de un argumento de historia gótica cuya presencia siniestra se encarna entre los humanos por el simple hecho de que ese también es lugar; conclusión ésta como cualquier otra, se nos antoja inquietante al final, mucho más que en La Semilla del Diablo, otro de sus claros referentes.
INTERCHANGE
Las urbes malayas están llenas de criaturas fantásticas y chamanes, una realidad que rara vez se manifiesta a nosotros, o eso es lo que parce querer decirnos Interchange. La cinta arranca con una descarada mezcla de Seven y La Última Ola, virando hacia el thriller sobrenatural y la historia romántica de criaturas de dos mundos. Esta parte de la película vence por su cursilería, cualquier buena intención que tuviera el director, más empeñado en resolver el choque entre el mundo racional e irracional a modo de cine de acción que de crear la atmósfera onírica que este tedioso filme necesitaba. Por su intrascendencia, Interchange es una de las películas que pasó sin pena por el Festival.
SWISS ARMY MAN
Ganadora a mejor película en el Festival, Swiss Army Man está protagonizada por dos de los actores jóvenes norteamericanos con más futuro: Paul Dano y Daniel Radcliff. Ambos hacen unos papeles magníficos, aunque el Radcliff el que carga con el peso de una interpretación más dura al encarnar a un flatulento cadáver que es rescatado de las aguas por el náufrago Paul Dano. Éste, solo y sin esperanzas, insufla una vida ficticia al cadáver para llevar el día a día. Swiss Army Man es, ante todo, una de esas historias de amistad y superación que recuerdan al cine familiar de los años 80. Con una incuantificable batería de recursos narrativos y visuales, Swiss Army Man es un festín para el aficionado al cine fantástico, un momento para parar de tomarnos en serio lo que estamos viendo y recrearnos con una película que tiene muchos valores positivos.
HARDCORE HENRY
El cine de acción no para de reinventarse y una prueba fehaciente de eso es Hardcore Henry, un auténtico festival de acción que no para ni un minuto. Concebido visualmente como un videojuego shooter, ha conseguido reunir más adrenalina y emoción que muchas películas norteamericanas de acción juntas, y es que, para más señas, Hardcore Henry cuenta con producción rusa. La libertad creativa que ofrece un videojuego de este tipo ha sido llevada a la pantalla de una forma casi literal, desde la colocación de las cámaras hasta las líneas de diálogo que recitan muchos personajes de la película -especialmente los secundarios-. Quizás sea una cinta incomprendida por el gran público, no acostumbrado a un cine de acción tan veloz, pero a buen seguro el aficionado la atesorará en su colección como una rara avis del actioner contemporáneo.
THE MASTER CLEANSE
Publicitada por el festival como una película que bebe del imaginario de David Cronenberg, The Master Cleanse puede asemejarse a ciertos recursos formales y temáticos del maestro canadiense, pero con toda la distancia del mundo a considerar. Este título, visto en la sección Panorama Fantastic remite más bien a aquella cinta que causó tan buena impresión en alguna edición pasada del festival llamada Bicho Malo (Bad Milo). Obviamente, The Master Cleanse es una comedia realizada con miras lejanas a ese Cronenberg de la nueva carne, de la somatización de los traumas que producen monstruos. Pero hay elementos que distancia a la película de esas señas de identidad y le confieren personalidad propia, como la presencia de dos pesos pesados del cine norteamericano de los ochenta: Oliver Platt y nada menos que Angelica Houston. Sorprende y se agradece la presencia de estos dos intérpretes que suben el caché a esta producción modesta y de resultados muy notables, con unos monstruitos muy simpaticones.
LIKE CATTLE TOWARDS BLOW
¿Autoría o pedantería? Es complicado decantar el término a emplear para un producto que no se deja clasificar. Comentado por los asistentes como cine gay, nada más lejos de la realidad, la película expone varios supuestos en los que el sexo es la salida a situaciones de desarraigo social y familiar, de ruptura emocional. El hecho de que casi todos los segmentos estén protagonizados por personas del sexo masculino -el último de ellos trata de una chico y una chica- no es indicador de que esta película se trate de cine gay, sino que utiliza al hombre como objeto artístico, como receptáculo de los traumas de sus protagonistas y así conseguir un efecto más plástico y marginal, más underground, si se quiere ver así. A pesar de todas las buenas intenciones, las más de dos horas de cinta se convierten en un ejercicio de pedantería -al menos para el que suscribe esta crónica- que llevan a muy poco. Sólo el segundo segmento puede ser el más interesante, una rudimentaria performance llena de contenido y fuerza, el resto es olvidable, o al menos para darle una segunda oportunidad si alguien se quedó con ganas.
PSYCHO RAMAN
El director de la interesante Gangs of Waysseypur, Anurag Kashyap, nos trae la última cinta de su prolífica carrera, Psycho Raman. Al igual que en el díptico citado -Gangs of Waysseypur se divide en dos partes- Psycho Raman destaca por su extremo realismo, centrado en las andanzas del asesino en serie Raman Raghva, un personaje real que ahora permanece encarcelado en la India por cometer más de 40 asesinatos. Falló el director a la hora de contar con un biopic de tal personaje, comenta en la presentación de la película, así que su propósito consistió en crear un drama sobre el origen del mal, poniendo de antítesis al asesino a un policía tan depravado y despiadado como él. Como suele pasar, las némesis terminan por identificarse y ambos son almas gemelas. La película tiene una sobria dirección y el retrato que el director realiza de la India dista mucho de ser poético o romántico. Psycho Raman es una cinta que complementa en muchos aspectos a Autohead, otra película más independiente vista en la presente edición del festival.
REMAINDER
Con evidentes ecos a esa obra maestra que fue Memento, esta película resulta ser muy destacable en tanto al desarrollo de la trama. Nada en el principio hace suponer lo que ocurrirá siquiera diez minutos después en el metraje. Con una confección bastante severa, una fotografía de tonos pardos y un puñado de intérpretes desconocidos, Remainder es la sorpresa indie del cine británico, un thriller a considerar por su brillantez y puesta en escena con tan poco medios con los que contó. No podemos contar gran cosa de la trama excepto que todo es una sorpresa contante, no hay que perder de vista este título.
VOYAGE OF TIME
La progresía está de suerte. Si cada par de años llega un filme que nos recuerda que vivimos en un planeta encantador y que debemos recordar que la Tierra es nuestra madre, pues bien, Terence Malick, el en otrora enfant terrible del cine independiente americano nos trae a su vejez esta cursilería que hará las delicias de las clases más acomodadas, que se sentarán frente a su televisor gigante a disfrutar de los efectos visuales de la película, de esos cromagnones depilados y unos anodinos dinosaurios digitales. Mientras pasamos esta película por el home cinema de casa se nos olvida que estamos consumiendo a un ritmo tan frenético que debemos dejar al resto del mundo sin comida ni agua, que somos los responsables de la cuarta extinción más bestial de la historia de nuestra planeta, etc. Mother, mother…repite insistentemente la voz de Cate Blanchet mientras mandamos el planeta a la mierda. La progresía está de suerte, puede dormir con la conciencia bien tranquila.